El cardenal Cañizares ha presidido el acto de homenaje que la Universidad Católica de Valencia (UCV) ha brindado al recientemente fallecido José Sanmartín, catedrático de Lógica y Filosofía de la Ciencia. En su intervención, el cardenal arzobispo de Valencia ha asegurado que el profesor Sanmartín “vivió, comunicó y enseñó aquello de lo que habla el papa Francisco en su nueva encíclica, Fratelli tutti; cuánto habría disfrutado él de haberla leído en vida, lo estará haciendo desde el cielo”.  

“Sanmartín fue una filigrana del Creador. Gracias a Dios por su obra con él, obra que cinceló con esmero, una obra de arte humano. Él fue el hombre de la Fides et Ratio, encarnó todo lo que el papa san Juan Pablo II nos dijo acerca de la fe y la razón. Fue un verdadero creyente que aunaba razón y fe, un auténtico defensor de la verdad del hombre frente a aquellos que utilizan la ciencia para borrarla”, ha afirmado el Gran Canciller de la UCV.   

De igual modo, el cardenal Cañizares ha subrayado que Sanmartín fue “un verdadero metafísico, alguien que fue contracorriente, un hombre de encuentro con la ciencia que, al mismo tiempo superó las aporías de la tecnología”. En opinión del arzobispo de Valencia, “hacen falta hombres como él para salir de la crisis de pensamiento que existe en el mundo occidental. De una manera especial en España, abrumada por la utilización de la ciencia con intereses que nada tienen que ver con ella y contraponiéndolos a la filosofía y a la metafísica, sobre todo”.  

RECTOR JOSÉ MANUEL PAGÁN: “SANMARTÍN DEDICÓ SU VIDA A LA FILOSOFÍA, ESTUDIOS QUE A VECES EL UTILITARISMO APARTA EN LA UNIVERSIDAD”  

Por su parte, el rector de la UCV, José Manuel Pagán, ha hecho énfasis en la dedicación de Sanmartín durante toda su vida profesional a la filosofía: “Los estudios de filosofía, tan tradicionales como denostados por el utilitarismo que a veces invade a la Universidad y que aparta a las humanidades a un segundo o tercer plano, contribuyen verdaderamente a la argamasa necesaria para vivir, para alcanzar y saber desarrollar la vida buena”.   

“En la UCV se le encomendaron a don José tareas de promoción de la investigación y proyectos estratégicos relacionados con la enseñanza online, así como coordinar monografías y publicaciones en la Facultad de Filosofía, incluido su querido proyecto de SCIO. Aquellos encargos los asumió como propios, sabiendo los obstáculos a los que iba a enfrentarse, pero con determinación”, ha señalado Pagán.   

Según ha expuesto el rector de la UCV, Sanmartín “supo coordinar a profesores e investigadores y transmitió con pasión su amor por la filosofía y el trabajo universitario. Gracias a ello, a su inteligencia, conocimientos y lucidez ayudaba a sus compañeros de claustro fueran mejores. Los supo embarcar en proyectos apasionantes, contribuyendo a que la Facultad de Filosofía de la UCV creciera. Estoy orgulloso de haber tenido en nuestro claustro a un profesor como el profesor José Sanmartín, que ha dejado huella en nuestra Facultad de Filosofía”.  

GINÉS MARCO: “CONFÍO EN QUE SU LEGADO CONITINÚE PRODUCIENDO FRUTOS IMPERECEDEROS” 

También el decano de la Facultad de Filosofía, Letras y Humanidades, Ginés Marco, ha querido recordar al insigne profesor e investigador, a quien conoció hace más de dos décadas en la Universidad de Valencia: “Aprecié en él desde el primer momento un auténtico ejemplo de liderazgo servidor con los alumnos que nos agolpábamos en derredor suyo; ese modelo de liderazgo tan reconocido en el mundo académico y que don José vivió en primera persona, adelantándose en su interioridad a aquello que corrientes doctrinales tratarán de reivindicar en años posteriores”.  

“En los últimos años de su vida, departí con él en innumerables ocasiones y aprendí lo que no está en los escritos de su sapiencia, de su rectitud, de su inmejorable estilo, de su magnanimidad… Su impronta de excelencia permanece muy viva entre todos los que conformamos la Facultad de Filosofía, Letras y Humanidades, su Facultad. Confío en que su legado continúe produciendo frutos académicos imperecederos”, ha asegurado. 

HOMENAJE DE SUS COLEGAS ACADÉMICOS 

En su ‘laudatio’, el catedrático de Filosofía del Derecho de la Universidad de Valencia, Vicente Bellver, ha remarcado la calidad humana de Sanmartín: “Juan Pablo II decía que los cristianos debíamos ser heraldos del Evangelio y expertos en humanidad. Comprendí estas palabras al conocer a Pepe”.   

“Era un gran docente, una persona comprometida con la vida pública, un innovador, alguien que veía siempre más allá; pero, sobre todo, Pepe era una buena persona. Expresaba mucha gratitud a su familia, a sus maestros, a sus raíces valencianas. Después de todo lo que había pasado en su vida, nunca hablaba mal de nadie. Al contrario, elogiaba a tantísimas personas, veía lo bueno de todos. Era un gran amigo, un líder de equipo, sabía sacar lo mejor de cada uno. Él tenía una visión esperanzada de la vida, confiaba en la Providencia y en el ser humano”, ha relatado.  

Asimismo, Bellver ha querido hacer énfasis en la importancia de Gloria, esposa de Sanmartín: “Sin Gloria, Pepe no hubiera sido el que hemos conocido. Con él tenemos una gran deuda de gratitud pero quiero dar las gracias especialmente hoy a Gloria porque, con ella, hemos tenido la oportunidad de disfrutar de Pepe todos estos años”.  

El sentido homenaje ha contado con testimonios personales, en primer lugar, de colegas académicos. Así, el catedrático de la Universidad de Valencia, Jesús Ballesteros, ha reconocido que a sus estudiantes siempre ha recomendado la lectura de las obras de Sanmartín, “siempre dedicadas a su mujer, Gloria. Para mí resulta insustituible como amigo entrañable y como luchador incansable por la justicia”.  

Igualmente, Jesús Conill, en nombre de Adela Cortina y del suyo propio, quien fue alumno suyo en la primera etapa docente de Sanmartín, centrada en la Lógica. El catedrático de la Universidad de Valencia ha querido recordar, en primer lugar, su modo de vivir la vida intelectual, “que supo hacer pasar a la vida de la acción. Llevó la Filosofía a la vida pública, a que fuera fecunda en nuestra sociedad”. En segundo lugar, supo ejercer su cargo con un sentido de la justicia como pocos, lo que no es habitual en el medio universitario, y hacer frente a las presiones ambientales y no plegarse a ciertos caciques universitarios.  

Javier Fernández, director de la revista Atalaya, ha recordado periodísticamente la labor de José Sanmartín, “oyente de radio, lector de prensa y crítico con la televisión”, principalmente, sus contribuciones enfocadas a mejorar el tratamiento informativo de la violencia terrorista y contra la mujer, que consideraba “un problema de derechos humanos”.