Cerca de 2.500 estudiantes han cumplido hoy su sueño de iniciar sus estudios de Grado en la Universidad Católica de Valencia (UCV), en un nuevo curso en el que, como parte de su compromiso social, la UCV continúa apostando por las becas al estudio, especialmente en estos momentos de dificultad para tantas familias afectadas por la crisis derivada de la pandemia de l1a Covid-19. 

Para facilitar la entrada de los alumnos en la Universidad, cada facultad celebra entre hoy y mañana las Jornadas de Acogida, en las que profesores y personal de administración y servicios dan la bienvenida a los nuevos alumnos y detallan los planes de estudio y la información institucional que los nuevos estudiantes precisan conocer. 

En estas jornadas se presenta también a los nuevos alumnos el Plan de Acción Tutorial (PAT), que desde hace tres años ha ampliado el acompañamiento del tutor al alumno a los cuatro cursos del grado, mejora que responde a los deseos del Cardenal Antonio Cañizares, que defiende la tutorización como un elemento fundamental en la identidad de la UCV. 

Los responsables académicos de cada grupo han informado también en ese primer día de las jornadas de acogida acerca de los aspectos más significativos de sus respectivas titulaciones y los distintos servicios que la UCV les brinda, como Capellanía, Acción Social, Servicio de Orientación, Aula de Teatro, Instituto de Lenguas o el Servicio de Actividad Física y Deporte. 

Todos ellos están orientados a una formación integral de los alumnos que les ayude a su plena realización personal y a ser profesionales competentes y personas comprometidas en la mejora y transformación de su sociedad. 

El inicio de un sueño: dedicarse a la vocación nacida en la infancia

Una de las nuevas caras de la UCV es Irene Nuin, original de la pequeña población de Rincón de Soto, en La Rioja. Comienza en este curso lo que para ella supone cumplir “un sueño” después de muchos años “de esfuerzo”, estudiar el Grado en Medicina: “Siempre he vivido muy de cerca la profesión sanitaria. Mi madre es médica y mi hermana enfermera y desde pequeña he querido ser como ellas. Espero estar a la altura y aprovechar la oportunidad que se me ha dado”.  

Si tuviera que elegir ahora especialidad, Irene cree que se decantaría por la “pediatría”, aunque ello supusiese “trabajar con niños enfermos, que están sufriendo”. No obstante, la nueva estudiante de la UCV opina que su “vocación” se ha visto reforzada durante estos años de pandemia: “Ha nacido en mí una mayor necesidad de ayudar, porque ahora hacen falta muchos sanitarios y quiero ser parte de ello”. 

Estudiar Medicina no es lo único que motiva a Irene de cara a su recién estrenada etapa universitaria: en los seis años que pasará en la UCV también le gustaría hacer algo de “voluntariado”, así como practicar su deporte “favorito”, el baloncesto.  

También tiene interés en el deporte Cayetano Nácher, nacido en Valencia, sobre todo desde una perspectiva profesional. Este joven valenciano cumple hoy su objetivo de estudiar Administración y Dirección de Empresas (ADE) y quiere enfocar su futuro profesional a ese ámbito: “Me gusta mucho el mundo empresarial en general, y si más adelante tengo que dedicarme a otras cosas lo haré, pero lo que realmente me entusiasma son las empresas deportivas”.  

“Es ilusionante también poder estudiar el Grado en ADE en esta universidad, que me han recomendado amigos y familiares. Cuando gente que te quiere te recomienda algo, te lo crees. Además, me ha gustado ver la cercanía de la UCV con los alumnos, creo que están pendientes de nuestra evolución y me parece algo muy importante. El Plan de Acción Tutorial es un punto a favor de esta universidad”, apunta Cayetano.   

Por su parte, Ernesto, de Bétera, ha comenzado en este día su andadura en la UCV apostando por el Grado en Ciencias del Mar: “Desde que aprendí a nadar de pequeño y después a jugar a waterpolo me fascinaba el agua y, más adelante, me empezó a llamar la atención todo lo relacionado con el mar”.  

“Antes de decidirme por esta carrera, me familiaricé con estudios relacionados con ella y con las opciones profesionales que tendría al finalizarla. Lo cierto es que estoy muy contento de poder estudiar Ciencias del Mar”, añade.

Dada su pasión por los animales, la intención de Ernesto en estos momentos iniciales de su aventura universitaria es enfocar su futuro profesional hacia la “biología marina”; aunque, como él dice, todavía tiene “toda la carrera por delante para decidirlo”.