La Cátedra de Teología de la Caridad Santo Tomás de Villanueva quiere compartir una reflexión con motivo de la primera Jornada Mundial de los Abuelos y Mayores que se celebrará este próximo domingo 25 de julio de 2021.

La Jornada que ha sido instituida por el Papa Francisco para reconocer la gran labor y el papel que tienen las personas mayores en la sociedad, lleva por lema este año: “Yo estoy contigo todos los días” (cf. Mt 28,20). Recogiendo las palabras de Jesucristo a sus discípulos antes de subir al cielo, el Papa Francisco quiere que los ancianos sientan que no están solos y cuentan con el amor de todos.

Los ancianos son parte fundamental de la sociedad, son los cimientos de nuestra historia viva y el eslabón para la trasmisión de nuestra fe y cultura, pero parece que la etapa de la vejez es vista como un problema. Sin embargo, el director ejecutivo de la Cátedra de Teología de la Caridad, Dr. José Luis Sánchez, también Vicario Episcopal de Cultura y RR.II. de la Diócesis de Valencia, ha señalado que “es necesario cambiar la perspectiva actual del proceso de envejecimiento y favorecer una imagen más completa y positiva de esta etapa vital y hacer descubrir la gran riqueza de los abuelos.” Ellos son “las raíces de nuestra familia, referentes necesarios en la construcción de nuestras vidas”.

Añade el director ejecutivo de la Cátedra que “los abuelos son hoy cada día más jóvenes y tienen la experiencia y conocimiento de lo vivido, tiempo para poder compartirlo con los demás y la generosidad para apoyar a otras generaciones a ir construyéndose como personas en todas las dimensiones de la vida.”

El Papa Francisco nos indica que ha instaurado esta Jornada Mundial para custodiar las raíces y transmitirlas y cuidar a los abuelos y personas mayores. “Es necesario atesorar la riqueza espiritual y humana que se fue transmitiendo a lo largo de las generaciones[i]”

Nuestro mayores son quienes nos han dado la vida y nos han transmitido los contenidos fundamentales de nuestro ser y del mundo. Ellos son quienes han realizado una labor en todas las dimensiones: intelectual, física, trasmisión del conocimiento. Además, “la dimensión religiosa que los abuelos nos han legado es el universo de sentido que da norte a nuestra existencia”.

En España estamos experimentando una situación demográfica marcada por el envejecimiento progresivo de la población, por ello, es necesario afrontar la atención a las personas mayores como un desafío para toda la sociedad en conjunto. En este sentido, el director ejecutivo de la cátedra indica que “es necesario recuperar el respeto y la deferencia hacia los ancianos que existía antiguamente y darles un rol protagonista en la sociedad en lugar de relegarlos a un segundo plano que es lo que vemos que sucede con frecuencia”.

Este último año marcado por la pandemia, debemos recordar a todas las personas mayores que han padecido la enfermedad y que han fallecido alejados de sus familiares y seres queridos. El Papa Francisco, presentándose como uno más, nos señala: “muchos de nosotros se han enfermado, y tantos se han ido o han visto apagarse la vida de sus cónyuges o de sus seres queridos. Muchos, aislados, han sufrido la soledad durante largo tiempo.[ii]”

Los mayores han sido el colectivo más vulnerable ante el COVID-19 y han sufrido las consecuencias de esta pandemia con mayor dureza, sin embargo, han demostrado una gran entereza ante todas las dificultades vividas. Por eso, en estos momentos, es necesario que los jóvenes actúen con la mayor prudencia para que podamos recuperarnos de la pandemia y los mayores puedan volver a disfrutar de la compañía y el amor de sus seres queridos.

En este sentido, el director de la Cátedra recuerda que “muchos abuelos han perdido la vida en esta pandemia en soledad, sin la compañía que hubieran necesitado.” Y ha pedido que ”este año, la primera Jornada Mundial de los abuelos y personas mayores sea un homenaje a sus vidas y un día de acción de gracias por lo que son y lo que nos han dado”.