Paz Suárez, del Departamento de Psicología de la Universidad de Oviedo, ha apelado en la Universidad Católica de Valencia (UCV) a la inclusión de niños con dislexia en el aula. “Sentirse diferente puede llevarles a creerse no aceptados, porque vivimos en una sociedad en la que parece que tenemos que ser todos iguales. No somos iguales y la escuela debe respetar los ritmos de aprendizaje de cada uno”, ha subrayado.

Suárez, que lleva investigando cerca de dos décadas las dificultades que presentan los niños y las personas adultas con dislexia, ha impartido una conferencia sobre los avances en su diagnóstico y tratamiento en la VII Jornada sobre Logopedia, Comunicación y Lenguaje.

Así, la ponente ha asegurado que “un tratamiento adecuado facilita el aprendizaje y una competencia lectora para desenvolverse adecuadamente. Si bien esta dificultad es congénita -porque la persona disléxica va a serlo siempre- podrá cursar estudios superiores”.

Sin embargo, “en el colegio la mayor parte de los aprendizajes son por vía escrita y los niños disléxicos sufren bastante. Hay que saber qué es la dislexia para no exigir más de aquello que no pueden dar, como lecturas largas o que copien demasiado, y facilitarles las tareas con ejercicios visuales. Se trata de que aprendan sin tener que centrarse en la lectura. No quiere decir que la evitemos, porque es parte de nuestras vidas, pero sí de que no sobrecarguemos al niño en ese aspecto para que no se sienta en un sitio hostil”, ha expresado.

Por otro lado, esta experta ha reconocido que “las personas a veces no están bien diagnosticadas y aparecen más casos de los que realmente hay. Cuando un niño tiene dificultades de aprendizaje lo mas fácil es pensar que será disléxico pero hay trastornos que se solapan y hay que saber diferenciarlos”.

“También puede ocurrir que aparecen varias dificultades al mismo tiempo, como déficit de atención, dislexia y déficit motor. Esto produce lagunas a nivel de investigación y de carencias de herramientas para trabajar”, ha añadido.

UNIDADES DE AFASIA Y DE AUTISMO DE LA UCV

En el encuentro también ha participado Anna García-Valdecasas, de la Clínica de Logopedia de la UCV, que ha dado a conocer los resultados iniciales de la unidad que ha puesto en marcha la UCV sobre atención e intervención a pacientes con afasia, principalmente como secuela de accidentes cerebro vasculares.

Estos pacientes, “pueden mejorar y recuperar habilidades lingüísticas. De hecho, el tratamiento que ofrece la UCV, con un enfoque mixto entre clínico y social, está obteniendo resultados excelentes: los pacientes mejoran en sus habilidades comunicativas y a la vez tienen oportunidad de estar con otros con la misma enfermedad, lo que les da una sensación de apoyo y de capacitación enorme”, ha señalado García-Valdecasas.

La tercera conferencia de la jornada la ha impartido Inmaculada Baixauli, profesora de la UCV, que ha expuesto distintos casos y perfiles de evolución óptima de niños con Transtorno del Espectro Autista (TEA) que tratan en la Unidad de Autismo de esta universidad.

Finalmente, José Francisco Cervera, vicedecano de Logopedia de la UCV y director de la jornada, ha disertado sobre una investigación realizada junto con Ana Pellicer, de la UCV, y Amparo Ygual, de la Universidad de Valencia, acerca de la posibilidad de fingir la dislexia. “Las universidades están concediendo beneficios a los estudiantes disléxicos que se presentan a las Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU) y se dan casos de personas que exageran una cierta sintomatología para obtener los beneficios de ser disléxico sin serlo. Así, investigamos la posible la detección del fraude mediante pruebas y los simuladores que están dando resultados óptimos”, ha detallado.