‘Los límites de la lealtad’ es el título de una obra que tiene como autor al profesor de Filosofía en la Victoria University Wellington (Nueva Zelanda) Simon Keller, y que Ginés Marco, decano de la Facultad de Filosofía de la Universidad Católica de Valencia (UCV), se ha encargado de introducir, fijar una edición crítica y traducir, secundado por la iniciativa de la editorial Rialp en su colección ‘Pensamiento actual’.

De este modo, Marco ha procurado adentrarse en uno de los temas que posee más variadas dimensiones: las relaciones interpersonales en el seno del matrimonio, las relaciones de amistad, las relaciones intraprofesionales y las relaciones que abarcan todo el espectro político.

La intención, según ha detallado, ha sido “desentrañar los nudos de la lealtad, que, en definitiva, supone delimitar el alcance y los límites de este concepto”. En este sentido, lo primero que ha reseñado es “la necesidad de perfilar lo que se está queriendo decir cuando se invoca el término lealtad”.

“¿Lealtad es sinónimo de sumisión o de obediencia ciega? En absoluto. La lealtad tiene una doble dirección y no sólo se vive en primera persona sino que, además, se puede llegar a vivir como sujeto colectivo. Por cierto, a partir de ese momento, los problemas se disparan porque, en nombre de la lealtad a una etnia, nación… Se pueden llegar a justificar actos abominables. También se puede incurrir en una flagrante parcialidad por la que determinadas personas parten con ventaja a la hora de acceder a una promoción profesional”, ha expresado.

Por otra parte, “la lealtad puede ser una expresión particularmente invocada en las diatribas parlamentarias en la medida en que el partido en el Gobierno reclama ‘lealtad institucional’ para afianzar ‘temas de Estado’, que no tiene por qué converger con el bien común sino que pueden ser el resultado de una necesidad de sacar adelante determinados temas contenidos en la agenda política y, en paralelo, silenciar cualquier atisbo de oposición que pudiera terciarse”, ha añadido.

Finalmente, en este libro se trata del fenómeno de la deslealtad, “que por supuesto suscita menos simpatías que la lealtad aunque es un concepto que, analizadas todas sus dimensiones, no tiene por qué merecer un juicio eminentemente negativo, dado que podría acoger en su seno la figura de quien delata injusticias o abusos de posición dominante por haberse desmarcado en un momento concreto de una lealtad mal entendida”, ha asegurado.

Como conclusión, “la lealtad es un término que está en boga, que merece un cuidadoso análisis y que debe servir para una sana reflexión en el seno de la institución familiar y en el tejido asociativo y en la dialéctica política”, ha reseñado Marco.