Proyecto financiado por el CITSAM
Investigadores de Medicina descubren nuevos avances en el tratamiento de la ceguera
Noticia publicada el
lunes, 25 de noviembre de 2019
El equipo de investigación de Neurobiología y Neurofisiología de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud de la Universidad Católica de Valencia (UCV) ha descubierto el papel que tienen ciertos micro ARNs en la degeneración retiniana producida en algunas enfermedades como la degeneración macular asociada a la edad (DMAE) o la retinopatía diabética (RD).
El grupo, liderado por Jorge Barcia, entre cuyos miembros se encuentra el profesor Javier Sancho y las estudiantes de doctorado María Oltra y Lorena Vidal, acaba de publicar sus descubrimientos en dos revistas de alto impacto científico: Scientific Reports (del grupo Nature) y Journal of Cellular and Molecular Medicine.
Estos trabajos son parte de la tesis de la doctoranda María Oltra, primera autora en ambos artículos. El proyecto ha sido financiado por el recién fundado Centro de Investigación Traslacional San Alberto Magno (CITSAM) y por ayudas internas para la investigación de la UCV.
La DMAE produce ceguera y afecta a gente mayor. Esta enfermedad puede cursar con angiogénesis o crecimiento exacerbado de vasos sanguíneos. Estos suelen ser frágiles y producen edemas que resultan en manchas en la visión central, por lo que se dificulta la visión en detalle.
Los micro ARNs o miARNs son pequeñas secuencias de ARN que pueden regular ARN mensajero, y por lo tanto la expresión de algunas proteínas. Los científicos de la UCV han descubierto que, cuando el epitelio pigmentario de la retina está dañado, algunos de estos miARNs están disminuidos. Estos son clave para regular el crecimiento de los vasos sanguíneos y, al reducirse estos miARNs, aumenta el nivel de algunos factores (como el factor de crecimiento vascular o VEGF) que hace que los capilares de la retina crezcan exageradamente. Además, han comprobado que estos miARNs del epitelio pueden liberarse hacia el exterior libremente, como es el caso de miARN 205, o hacerlo encapsulados en pequeñas vesículas extracelulares o exosomas, como lo hacen los miARNs 302a y 122.
El descubrimiento de estas pequeñas cadenas de ARN en vesículas extracelulares de la retina es un paso más hacia un posible diagnóstico temprano de estas enfermedades, que los investigadores ya hipotetizaron hace un tiempo (enlazar con noticia anterior). Además, el grupo también ha observado, en experimentos in vitro, que la adición de esos miARNs es capaz de disminuir el efecto angiogénico. Esto apunta a que sería posible tratar estas enfermedades aplicando esos miARNs: 205, 302a y 122.