“El desarrollo de la LOMLOE va a depender de las competencias que se asignen en las comunidades autónomas y a los centros; así, la apuesta por la inclusión y por la digitalización de esta ley dependerá de una financiación adecuada, sin la que no puede haber innovación ni inclusión”. Son palabras del inspector de Educación Jesús Marrodán, quien ha pronunciado una conferencia en la Facultad de Magisterio y Ciencias de la Educación de la Universidad Católica de Valencia (UCV), en la que ha explicado los contenidos y posibles repercusiones de la nueva normativa.

En su opinión, el reto más importante es cómo se van a distribuir las competencias sobre la cuestión educativa entre el Estado y las comunidades autónomas, así como qué fondos económicos se van a asignar para todo este proyecto. “No olvidemos que la LOMLOE mantiene mucho el espíritu de la LOE, es un paso adelante y otro hacia atrás porque incorpora cosas novedosas -como por ejemplo los Objetivos de Desarrollo Sostenible- pero vuelve a modelos que están ya caducos”.

Otros retos a los que se ha referido son el de la escolarización de la educación infantil, que “se está desarrollando exclusivamente desde los objetivos de que sea en la red pública” y en qué situación se van a quedar los centros concertados. “Al condicionar la elección del centro a la zona se está limitando el derecho de los padres de irse a otro centro público o privado; además, la planificación escolar se basa teniendo en cuenta solamente a los centros públicos, y eso es obviar que existen una red de centros concertados muy potente; planificar una red una gestión educativa sin tenerla en cuenta”.

Asimismo, el ponente se ha referido a otro reto muy “impactante” y es la escolarización del alumnado que tiene necesidades de apoyo educativo, especialmente de educación especial: “es un reto fundamental porque la inclusión sin esa escolarización irá directa hacia el fracaso”. Dicha escolarización “necesita recursos humanos y cambios de mentalidad y eso no está tan claro que lo tengamos, por eso hay una polémica por la propuesta del Ministerio de suprimir o ir quitando alumnado de los centros de educación especial. La idea de la Administración es no seguir creando ese tipo de centros o vaciarlos de alumnos”, ha subrayado Marrodán.

“SE HA SUPRIMIDO LA DEMANDA SOCIAL”

Respecto a los rumores que auguran la retirada de ayudas a los colegios concertados, este experto ha afirmado que “no tienen fundamento. Hoy por hoy sigue vigente la Ley Orgánica de Educación y sigue vigente el real decreto de 1985 que habla de los conciertos; otra cosa es que el Ministerio cambie la ley de conciertos”.

No obstante, el inspector de Educación sí que ha reconocido que “se apuesta por primar los conciertos con ciertos centros”, así como “se ha suprimido la demanda social, es decir, no se tiene en cuenta la voluntad de los padres”. Por ello, “el desarrollo de la LOMLOE tiene que lograr el consenso social educativo que no ha tenido en el Parlamento. El problema es que no ha sido una ley de consenso; tiene que tener un desarrollo que permita convencer a la mayoría de la comunidad educativa que es una ley para todos”.

La ponencia de Marrodán se enmarca en un ciclo organizado por la Facultad de Magisterio y Ciencias de la Educación de la UCV y la Universidad Cardenal Herrera-CEU, en el que colaboran las entidades Fundación San Vicente Mártir Colegios Diocesanos, Escuelas Católicas-CV, FCAPA-CV, y FECEVAL.

En UCV online puede encontrar la conferencia completa.