La Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud de la Universidad Católica de Valencia (UCV) ha organizado un curso sobre nuevas metodologías docentes, dirigido a todo el claustro, que ha impartido Leire Arbea, vicedecana de Innovación Educativa y directora de la Unidad de Educación Médica de la Facultad de Medicina de la Universidad de Navarra.  

La sesión ha sido presentada por el decano de la Facultad, Carlos Barrios, que ha señalado que “el complejo contexto actual del mundo, de nuestra sociedad y de nuestro perfil de salud, requiere una serie de innovaciones en la educación médica en busca de la formación integral de los profesionales sanitarios que necesitamos” y que “la educación médica a nivel global está actualmente inmersa una serie de cambios metodológicos que pretenden adaptarse a la rápida transformación que está experimentando la propia medicina”.  

En este sentido, ha afirmado que “los docentes nos hemos empeñado durante años en trasmitir solo conocimientos científico-técnicos mediante lecciones magistrales pensando que eso sería lo mejor para mejorar la calidad de nuestra asistencia. Y eso se está viendo que es insuficiente. Tenemos que hacer más atractiva la docencia, facilitando la implicación activa de los alumnos en su propia formación”.  

De esta forma, “alentados por la propia Conferencia Nacional de Decanos de Facultades de Medicina de España, y con el apoyo de nuestro Rectorado, el equipo Decanal hemos comenzado a trabajar en cómo incorporarnos a este proceso de cambio de paradigma de la educación en Ciencias de la Salud”, ha subrayado Barrios.  

Cambiar la formación pedagógica ante un entorno social y vital diferente  

En esta misma línea se ha expresado Leire Arbea, que ha afirmado que “el objetivo es que el equipo directivo de la Facultad y los docentes salgan de la sesión entendiendo que es necesario un cambio en la formación pedagógica de los docentes en Medicina, ya que los estudiantes y el entorno social y vital al que se van a enfrentar al final de la carrera también es diferente”.  

En su intervención, Arbea ha relatado su experiencia, aunque subrayado que “cada universidad tendrá que diseñar su propia transición a esa docencia más integrada y centrada en el alumno, con idea de formar ese alumno que se enfrente a las necesidades en salud del siglo XXI”.  

Asimismo, ha expuesto en la sesión una metodología de clase inversa que pretende que el aprendizaje en el aula no quede solo en la mera transmisión de conocimiento, “sino que dé un paso más allá y los alumnos salgan de la misma habiendo aplicado los conocimientos nuevos de un tema, consiguiendo así un conocimiento más profundo y mejor”.  

En este punto, Arbea ha querido dejar claro que todas estas nuevas metodologías “no implican bajar el nivel de enseñanza y de la exigencia a los alumnos, “que debe seguir igual de alto que hasta ahora”. El objetivo, en todo caso, es dotar de herramientas al profesorado para dirigir los contenidos en el contexto motivacional de los alumnos, en su “idioma”, prepararlos con competencias transversales para que sean “no solo los mejores científicos, sino también los mejores médicos”.