La Universidad Católica de Valencia (UCV) ha celebrado el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia con una mesa redonda en formato online en la que han participado investigadoras de diferentes ámbitos científicos que han coincidido en señalar que “falta todavía camino por recorrer para que haya una igualdad real entre hombres y mujeres en el ámbito científico “.

El evento, organizado por el Vicerrectorado de Investigación y la Oficina de Transferencia de Resultados de Investigación (OTRI) de la UCV, ha tenido lugar en el claustro de la Sede San Carlos Borromeo y ha sido presentado por el vicerrector de Investigación, Francisco Arteaga, y moderado por la directora del Institut Isabel de Villena d’Estudis Medievals i Renaixentistes (IVEMIR-UCV), Anna Isabel Peirats,  que ha iniciado su intervención destacando  que “atrás quedan los siglos en los que la mujer no participaba en las actividades científicas, y tenía limitado el acceso a la formación universitaria. Actualmente, la realidad es distinta, según se constata por el elevado porcentaje de mujeres en determinadas áreas de estudio”.

No obstante, ha añadido Peirats, “es necesario promover el acceso de las mujeres y las niñas a la educación, la capacitación y la investigación en los ámbitos de la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas, estas últimas áreas con menor representación de las mujeres, según cifras de la ONU, mientras en otras áreas representan un elevado porcentaje, como es el caso de las Humanidades, Ciencias Sociales, Biología o Química”.

Llúcia Martín: “En humanidades hay pocas mujeres que se deciden por la investigación porque la docencia les resulta más compatible con su vida familiar”

Llúcia Martín, catedrática en Filología de la Universidad de Alicante, ha destacado la idoneidad de un Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, “no solo por visibilizar a las mujeres científicas -cada vez más numerosas- sino también para animar a futuras investigadoras a emprender estos estudios”.

En este sentido, Martín ha valorado el “impulso en los centros de educación primaria y secundaria para potenciar que las chicas opten cada vez más a carreras de tipo científico”, y ha señalado que “el problema de que no exista una igualdad real en las cifras puede estar más en el ámbito familiar que en el educativo”.

En lo que a su experiencia personal se refiere, Martin ha afirmado que “si bien es verdad que durante mucho tiempo he sido la única mujer en departamentos solo de hombres y de las pocas mujeres participantes en reuniones donde la mayoría de profesores universitarios eran hombres, el verdadero problema lo he tenido a la hora de la maternidad”.

En este sentido, ha lamentado que en su campo -el de las humanidades- “sean pocas las mujeres que se deciden por una carrera de investigación posiblemente porque la docencia les resulta más compatible y más fácil con su vida familiar”.

Mª Carmen Gálvez: “Es fundamental trasladar a las niñas que la ciencia es para todos y que está abierta a cualquiera que de verdad tenga vocación”

Por su parte, Mª Carmen Gálvez, profesora contratada doctora de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la Universidad Rey Juan Carlos, ha hecho hincapié en que el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia se celebra “solo” desde 2015 y ha afirmado que “todavía los niveles de participación de la mujer en la ciencia están muy limitados”.

Gálvez también ha coincidido en señalar la dificultad de la conciliación y ha lamentado que “a día de hoy, no se reconoce como una necesidad social el cuidado no solo de menores, sino también de mayores. Ese es el gran problema, y dónde queda más camino por recorrer”, ha subrayado.

Por otro lado, Gálvez ha insistido en que “es fundamental trasladar a las niñas que la ciencia es para todos y que está abierta a cualquiera que de verdad tenga vocación”.

María Montoya: “No aprovechamos completamente el talento del 50 por ciento de la población”

Más contundente se ha mostrado María Montoya, investigadora principal del Laboratorio Inmunología Viral: Terapias y Vacunas del Centro de Investigaciones Biológicas Margarita Salas del CSIC, que ha manifestado que “por desgracia, sigue siendo necesario un día así porque no hemos llegado a la paridad que se necesita para visibilizar el trabajo de las mujeres en el mundo de la ciencia, de la tecnología y de la innovación”.

“Las mujeres somos el 50 por ciento de la ciudadanía, y ese porcentaje no se ve reflejado en el mundo de la ciencia. La consecuencia de este desequilibrio de género es que no aprovechamos completamente el talento del 50 por ciento de la población que puede ser determinante a la hora de hacer descubrimientos, patentes, innovaciones o empresas.”, ha añadido.

Montoya ha señalado tres ejes para revertir la situación: “Uno somos nosotros mismos, los investigadores, tanto hombres como mujeres, promoviendo y mentorizando a jóvenes promesas para ayudarles en el mundo de la ciencia; En un segundo plano las instituciones, tanto universidades como centros de investigación y hospitales para promocionar y ayudar a las mujeres en su carrera; y en tercer nivel, los políticos, y las personas que hacen las leyes, para que las mujeres tengan un ambiente en el que puedan desarrollar su carrera en condiciones óptimas”.

En el plano personal, la investigadora del CSIC ha reconocido que ha tenido trabas “como todas las mujeres en el mundo de la ciencia”. “Cuando estaba trabajando como estudiante pre doctoral no tenía problemas. Es en el momento que das el paso a tener una cierta responsabilidad, como jefe de grupo, cuando las cosas ya no son tan fáciles para las mujeres, y ves cómo compañeros tuyos, en igualdad de condiciones o incluso con peores currículumns, progresan por delante de ti”, ha relatado.

En este punto, Montoya ha subrayado que “se trata de un problema global, no solo de mujeres” y ha invitado a sus colegas masculinos “a trabajar conjuntamente para llegar a un equilibrio de género en la ciencia”.

María Jesús Vicent: “La forma de afrontar los problemas que tenemos las mujeres es igual de buena que la de los hombres, pero diferente”

Por su parte, María Jesús Vicent, investigadora principal del Laboratorio de Polímeros Terapéuticos del Centro de Investigación Príncipe Felipe, ha indicado que es muy importante tener un día en el que se muestre que es necesaria una igualdad entre hombres y mujeres en la ciencia; y en el que se anime a las mujeres y a las niñas con vocación a iniciar una carrera científica”.

En su propia experiencia profesional, salvo anécdotas puntuales, Vicent ha afirmado no tener problemas por ser mujer, aunque sí se ha referido a los que tuvo en otro tiempo su mentora, Ruth Duncan, pionera en el campo de Polímeros Terapéuticos.

“Ella sí me cuenta que vivió muchos más problemas de este tipo en un mundo que en aquella época si era un mundo de hombres, que chocaba mucho porque la forma de afrontar los problemas que tenemos las mujeres es igual de buena que la de los hombres, pero diferente; y que tuvo que aprender a hablar como hablaban sus colegas hombres”.

En este sentido, Vicent ha afirmado que se trata de un problema “educacional”. “Es necesario educar, no solo en colegios e institutos, sino también en casa, para enseñar lo que se puede conseguir si se trabaja, independientemente del sexo, para dar solución a problemas de la sociedad en general que es, al fin y al cabo, para lo que sirve la ciencia”, ha concluido.

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