Las Clínicas de la Universidad Católica de Valencia (UCV) han puesto sus instalaciones de odontología al servicio de los profesionales que han perdido sus clínicas por la dana del pasado 29 de octubre. La iniciativa, lanzada junto con el Ilustre Colegio Oficial de Odontólogos y Estomatólogos de Valencia, beneficiará tanto a profesionales como a usuarios de las zonas afectadas.

Cristina Micó, directora adjunta de las Clínicas, reconoce “la clara vocación de servicio de la UCV", que “no puede más que ponerse a disposición de la sociedad valenciana en un momento tan delicado como éste y, más si cabe, en algo tan importante como es la salud bucodental de los ciudadanos”. Además, “se trata de un sector que requiere de una tecnología y de unas condiciones de esterilización muy estrictas y no se pueden restituir de la noche a la mañana, con lo que, durante este tiempo, los profesionales odontólogos afectados podrán hacer uso de todo ello en nuestras instalaciones”, señala.

La Universidad Católica de Valencia, con los afectados desde el primer día

Esta acción se suma al plan especial que ha puesto en marcha la Universidad Católica de Valencia tras la catástrofe y que incluye, entre otras medidas, la coordinación de voluntariado universitario, becas de ayuda a los alumnos damnificados, asistencia pastoral, atención psicológica, acompañamiento a personas mayores en situación de vulnerabilidad y cuidados veterinarios.