Las jornadas del Profesorado analizan cómo “el Papa asume con maestría y firmeza la necesidad de defender a los más vulnerables”
Noticia publicada el
miércoles, 20 de junio de 2018
El obispo auxiliar de Valencia, Esteban Escudero, vicecanciller de la Universidad Católica de Valencia (UCV) ha subrayado en las Jornadas del Profesorado que “el Papa Francisco considera la ecología no sólo como una cuestión medioambiental sino como el cumplimiento de la voluntad de Dios que se traduce en una ley natural. Por lo tanto, está relacionada tanto con la naturaleza como con la vida del hombre”.
Así, “su visión de la ecología no es parcial, como se tiene tantas veces, sino global, pues abarca toda la problemática de Dios y el mundo teniendo en cuenta la voluntad divina para que funcione bien la persona, la sociedad y las relaciones con el medioambiente”, ha afirmado el vicecanciller de esta universidad.
Escudero ha dirigido un encuentro formativo a profesores de la UCV, centrado en esta edición en la Carta Encíclica del Papa Francisco Laudato Si, que “pretende tener una proyección para los alumnos durante el curso que viene sobre el curso a través de conferencias de aula de profesores del Departamento de Teología y capellanes de la UCV. Buscamos que la comunidad universitaria tenga una sensibilización sobre este problemática así como una mentalidad común sobre los grandes temas del Magisterio”, ha expresado.
En la sesión ha participado también Ginés Marco, vicerrector para la Investigación y la Docencia de la UCV, que se ha centrado en la antropología filosófica subyacente en este texto de Francisco, “donde aparecen, entre otros, la globalización o la teoría del poder, que trasvasa el ámbito político y económico para adentrarse también el cultural”.
Por ello, “frente a ideologías que anteponen el bien humano, el bien común, al interés de unos pocos, de unos privilegiados, el Papa asume con maestría y firmeza la necesidad de defender a todos, especialmente a los más vulnerables. Y esto lo hace con una metodología práctica, sencilla, llegando a todos y desentrañando las miserias que se esconden detrás de aquellos postulados que aparentemente se presentan como neutrales y objetivos pero que no lo son”.
Por su parte, Juan Miguel Díaz, catedrático de Sagrada Escritura de la Facultad de Teología de Valencia, que ha incidido en que “la fe cristiana puede hacer una aportación grande al problema del cuidado del planeta, esto es, saber que no somos dueños de la Tierra –es de Dios, nosotros somos administradores- que estamos en relación muy estrecha con los otros y con la creación, que tenemos que cuidar bien”.
En este sentido, el teólogo valenciano, que se ha centrado en su ponencia en el capítulo segundo de la encíclica, ha resaltado que “el Papa saca consecuencias muy interesantes en orden al cuidado de la Tierra. La fe incide en la existencia, no sólo en la moral o individual, sino también en la vida. Y desde los contenidos de la fe se puede crear una conciencia y una sensibilidad en los alumnos”.
En esta primera sesión de la Jornada del Profesorado, celebrada en el Colegio San Vicente Ferrer-Dominicos, ha intervenido Ferrán Lluch, director del Secretariado Diocesano de Ecología Humana, que ha analizado el primer capítulo de Laudato Si, ha asegurado que “el Papa expone la situación real de cómo está nuestra casa desde un punto de vista ético y científico; cuál es el punto de partida, cómo y qué debemos hacer”.
En este sentido, Lluch, que es profesor del Instituto Diocesano de Ciencias Religiosas, ha asegurado que “la situación actual es bastante dramática; el Papa habla de un gemido de la Creación misma y del ser humano como parte de ésta, puesto que la situación ambiental deriva de una ética global en la que no se experimenta un gusto por la sostenibilidad sino por acaparar, por tener por encima del ser”.