La Facultad de Magisterio y Ciencias de la Educación de la Universidad Católica de Valencia (UCV) ofrece una nueva edición, tras el éxito del pasado curso, del certificado de extensión universitaria “Educar para el amor. Curso básico de educación afectivo-sexual”.

Dirige el programa el profesor de la UCV y del Pontificio Instituto Juan Pablo II, Javier Ros, quien avanza en la siguiente entrevista el planteamiento, currículum e interés de esta “formación abierta a cualquier persona interesada en conocer los fundamentos del amor y la sexualidad, así como su dimensión pedagógica”.

Profesor Ros, ¿por qué hay que educar para el amor, más aún, a estudiantes universitarios?

Pues porque la experiencia amorosa y, por ende, la sexual, es central en el ser humano y puede ser calificada como “natural”, sin embargo, no hay nada más necesario de ser educado en la persona que esta dimensión que atraviesa toda nuestra existencia. Se trata de una dimensión que, si bien es fuente de grandes momentos en la vida de todos nosotros, también se encuentra en el origen de múltiples situaciones difíciles en el recorrido vital.

Desde este planteamiento, la UCV ha decidido proporcionar a los futuros maestros el bagaje necesario para poder afrontar la educación del mundo afectivo-sexual del alumnado desde el primer momento de su incorporación a las aulas. Al tratarse de un certificado de extensión universitaria no es necesario poseer ningún título universitario para acceder.

¿En qué medida este certificado universitario es imprescindible, además de lo que ya ha indicado?

Las nuevas leyes educativas incluyen la transversalidad de los contenidos de la educación sexual en todo el itinerario académico, por lo que es imprescindible esta formación desde una perspectiva que haga justicia a la verdad del ser humano y que, además, proporcione a los futuros docentes las claves pedagógicas y didácticas de su enseñanza.

En este sentido, las entidades educativas católicas empiezan a buscar y contratar perfiles profesionales con esta formación específica y que se ajuste a la verdad del hombre y a las enseñanzas de la Iglesia. De esta forma, el certificado universitario Educar para el amor se incluye en el Suplemento Europeo de los títulos de los grados en Magisterio y busca ser un elemento más en la mejora de la empleabilidad de nuestros estudiantes, favoreciendo su inserción laboral en la escuela católica.

Tras la experiencia de la primera edición, ¿qué resaltaría del curso?

La experiencia, aún con las dificultades propias de la pandemia y las limitaciones de presencialidad, fue muy buena. Un primer elemento destacable es la multidisciplinariedad del curso, así como la calidad y alto nivel de coordinación del claustro de profesores. Por otro lado, en esta segunda edición se ha implementado un trabajo práctico final tutorizado que permita a los alumnos “aterrizar” todo lo aprendido y dotarles de herramientas concretas de cara a su futura práctica docente.

Finalmente, destacar que no solamente se trata de una formación técnica en los aspectos mencionados, sino que sus contenidos y enfoque metodológico favorecen la reflexividad y el desarrollo madurativo de los propios alumnos del curso, como nos ha demostrado la experiencia del curso pasado.

¿En qué se diferencia este curso de otros similares que se imparten actualmente en otras instituciones?

Vivimos en una sociedad que destaca por el cambio, por la llegada constante de nuevas tendencias y productos, también en lo referente a la expresión del amor y la vivencia de la sexualidad. De esta forma, el curso se ha planteado con una parte inicial que busca cimentar ampliamente la realidad afectivo-sexual para después llegar a los elementos más aplicativos. Esta es la principal diferencia con otros programas: no buscamos únicamente proporcionar al docente o futuro docente “recetas” para situaciones concretas de hoy en día, sino que, junto con este tipo de aportaciones, Educar para el amor proporciona una gran fundamentación multidisciplinar para que los educadores puedan afrontar desde presupuestos certeros y estables cualquier futura situación educativa en este ámbito, tanto en el contexto familiar como en el escolar.

¿Cuáles son los puntos centrales del currículum?

Toda la formación viene avalada por la experiencia de más de veinticinco años en Valencia del Pontificio Instituto Teológico Juan Pablo II. Fe y razón son el camino por el que apostamos desde la dirección y el profesorado, con el fin de llevar adelante una propuesta integral de educación para el amor y la sexualidad.

El punto de partida es el análisis teórico y fenomenológico del amor. Con este arranque, se van engarzando diversos contenidos que estructuran el concepto de persona humana, de la experiencia sexual, así como de los procesos fisiológicos, psicológicos y emocionales del universo afectivo-sexual. El análisis de la sociedad actual permite contextualizar este marco teórico desembocando en la parte del curso donde se analizan y se proporcionan herramientas para la comunicación en contextos educativos y de acompañamiento, así como todo lo relacionado con lo pedagógico y didáctico, tanto en el seno de la educación familiar como en los diversos programas educativos que existen o que se pueden crear.

¿Quiere apuntar algún dato más?

Sí, el curso empieza el 8 de octubre y finalizará para Pascua. Se impartirá los viernes por la tarde en la sede de Godella de la UCV.

Este año el curso va a ser totalmente presencial en la parte que así marca el diseño del mismo, ya que es fundamental el “cara a cara” en temas tan delicados y fundamentales de la persona. No es un curso más, sino que permite a cada uno de los alumnos ahondar en su propia realidad desde la luz de una antropología adecuada y el anuncio de la Verdad.

Toda la información y acceso a la inscripción en el siguiente link.