Curso para educadores
Mª Consolación Isart: “El ‘genio femenino’ radica en olvidarse de sí misma para hacer grandes obras en favor del otro”
Noticia publicada el
lunes, 3 de mayo de 2021
La Fundación Universitaria Española (FUE) ha dedicado este año su XXV Curso de Pedagogía para Educadores al estudio monográfico de la mujer, “Pensar la mujer. Más allá de las ideologías”. La conferencia de clausura, titulada “El profetismo de la mujer: María, la Iglesia, la mujer”, ha corrido a cargo de la decana de la Facultad de Magisterio y Ciencias de la Educación, Mª Consolación Isart.
En su intervención, Isart ha expresado que “en la FUE no solo se abordan temas de absoluta actualidad, sino que, a la vez, se van dando en ellos pistas fundamentales de orientación que van conduciendo, sin casi darnos cuenta, a verdaderas soluciones”. En este sentido, ha destacado que “la misión del profeta no es anunciar desventuras, sino abrir al hombre a la esperanza”, virtud que ha querido transmitir en su conferencia a partir de la experiencia de mujeres extraordinarias.
Entre otras a las que se ha referido están las mujeres de la Escritura que Dios ha suscitado en "situaciones límite": Judit y Esther, “capaces de enfrentarse a todo tipo de dificultades, pues se saben instrumentos en manos del Fuerte”; la profetisa Ana, en la que puede reconocerse “una misión natural de la mujer, hacer posible el futuro, otear lo que aún no se ve, acostumbrar las pupilas a la suave luz del Invisible”. La profesora Isart ha aludido también a la Samaritana y la Magdalena, “dos mujeres de ‘la calle’, pecadoras, a las que Jesús da un papel relevante en la evangelización, rompiendo los esquemas sociales y culturales del momento”.
A partir de ellas, la ponente ha reconocido “que Dios se sirve de la mujer en momentos en que la humanidad vive situaciones más especiales. El genio femenino radica en esa habilidad, tan especial de la mujer, de cuidar del ser humano; olvidarse de sí misma para hacer grandes obras en favor del otro”.
Asimismo, Isart se ha referido a Juana de Arco, Catalina de Siena, Clara de Asís, Teresa de Jesús, Isabel La Católica, Teresa Benedicta de la Cruz o Teresa de Calcuta para reconocer como misión de la mujer “reconstruir la vida allí donde se encuentra amenazada. Esta capacidad de sostener y dar un alma a la realidad humana desempeña una función histórica y cultural de gran importancia”. No obstante, si alguien en la historia desempeña este cometido es la Virgen María, a quien Benedicto XVI se refirió como “una ventana de esperanza que Dios abre cuando el hombre le cierra la puerta”.