La Universidad Católica de Valencia (UCV) y el Pontificio Instituto Teológico Juan Pablo II han presentado el libro Crecer como niños, crecer como niñas (Campomanes, 2022), obra del profesor Óscar García Mulet, religioso de la congregación Cooperatores Veritatis de la Madre de Dios.

La publicación tiene como interés principal, según el propio autor, describir cómo es el crecimiento propio de niños y niñas desde su concepción. Las primeras etapas de la vida nos configuran, y ambas, masculinidad y feminidad, necesitan un acompañamiento para madurar". En ese sentido, opina que “el ambiente actual no favorece que los niños sean niños y las niñas, niñas. Todo lo contrario”.

En el acto, celebrado en la Sede Santa Úrsula, han acompañado al autor el rector, José Manuel Pagán; Julio Tudela, director del Observatorio de Bioética; y Juan Andrés Talens, decano de la sección en Valencia del Pontificio Instituto Juan Pablo II, donde García Mulet ha cursado su licenciatura.

José Manuel Pagán: “Como hizo presente Benedicto XVI, todo se desmorona si falta la verdad”

José Manuel Pagán ha abierto la sesión apuntando la cantidad de leyes que “se enmarcan dentro del proceso de ingeniería social que sufrimos. La semana pasada celebramos en este mismo salón una jornada donde analizábamos los peligrosos y ocultos engaños que esconde la Agenda 2030. Este proceso de ingeniería social trata de imponer una nueva concepción del ser humano, que parte de una autonomía radical del individuo y de un falso concepto de libertad, entendida como el hecho de no ser impedido de seguir mis deseos inmediatos porque, recuérdenlo todos ‘soy lo que siento’”.

Asimismo, el rector se ha referido al papa Benedicto XVI, que tenía como lema episcopal Cooperatores Veritatis, como la congregación a la que pertenece García Mulet. “Cuando explicaba el motivo por el que había elegido este versículo de la tercera carta de San Juan decía que, por un lado, le parecía ser la relación entre su tarea previa como profesor y su nueva misión, al ser nombrado arzobispo de Múnich y Freising. Lo que estaba en juego y seguía estándolo era seguir la verdad, estar a su servicio. Por otro lado, como señaló entonces e hizo presente a lo largo de su pontificado, todo se desmorona si falta la verdad”.

En su intervención también ha recordado a san José de Calasanz, en cuya figura y misión hunde sus raíces este instituto clerical: “Tenía claro que los más pobres no podía quedar fuera de esta llamada a la verdad. No dejemos tampoco hoy de ir al encuentro de quienes se sitúan en las periferias, muchas veces existenciales, ahí se sitúan muchos de nuestros universitarios, de nuestros jóvenes, salgamos a su encuentro. Cooperar con la verdad es comprometerse personalmente en la bella tarea de liberar y hacer felices a nuestros jóvenes; seguros, porque lo hemos experimentado, de que la verdad nos hace libres. Gracias, padre Óscar, por este libro, que nos ayuda en esta misión”.

Julio Tudela: “Es necesario un proceso madurativo pautado, de complejidad creciente, que necesita guía y tiempo”

Julio Tudela ha sido el encargado de presentar el libro, del cual ha resaltado, en primer lugar, su análisis sobre la naturaleza humana “que heredamos, que no diseñamos y que viene desarrollándose paulatinamente. No nacemos con la madurez, sino con una gran dependencia, fragilidad e ignorancia”. Es por ello “necesario” un proceso madurativo “pautado, gradual, de complejidad creciente, que necesita guía, tiempo, ser alimentado, perdonado, consolado y orientado”. 

Esta naturaleza humana tiene, además, una vocación: “No somos cosas aleatorias que surgen en la naturaleza y luego desaparecen, sino que nacemos con una profunda vocación de eternidad. El padre y la madre que conciben a su hijo, lo paren, cuidan y educan, no deberían perder nunca de vista que este hijo es para la eternidad”.

Otro rasgo que con el que el director del Observatorio de Bioética ha caracterizado esta naturaleza es la belleza en su diversidad y complementariedad. “Es bello que seamos diferentes como personas, con nuestros caracteres, con nuestros sexos; por eso es un gran error educativo perseguir la uniformidad, pretender pasar a todos por el mismo tubo”. Esta diversidad, no obstante, no es aleatoria, sino porque “somos piezas que encajan, tenemos diversidad con vocación de complementariedad. Somos cuando nos completamos, somos cuando nos donamos, somos cuando recibimos”. 

García Mulet ha tomado la palabra para justificar la intención del libro y agradecer a quienes han colaborado en su elaboración y difusión, tal y como adelantó en la siguiente entrevista. La obra ha sido prologada por el obispo José Ignacio Munilla, que se ha conectado por video para saludar a los participantes, que han llenado el salón de actos.