Presentación
La era digital ha ofrecido un nuevo mercado de acción, donde algunos elementos que podrían considerarse económicamente inalcanzables hace apenas una década, y eran casi cercanos a la ciencia ficción, están actualmente a nuestra disposición. No es sorprendente que el impacto de estas tecnologías haya atraído considerable atención en la comunidad científica, lo que ha llevado a innovaciones tanto aplicadas como teorías en varios campos, como el comportamiento y el cerebro humano. Un ejemplo que podría reflejar el papel de la digitalización en nuestra sociedad es la evolución de la búsqueda de soluciones digitales (e.g., wayfindings o el GPS). Hoy en día, al usar este GPS (Sistema de posicionamiento global), es menos probable que miremos o creemos un mapa mental para hacer un viaje, evitando el esfuerzo cognitivo inherente para ello. En este escenario, el GPS sugerirá una ruta óptima, evitando otras opciones a considerar. En otras palabras, comúnmente dejamos que el dispositivo se encargue de la carga de demandas que, de lo contrario, diferentes redes en nuestro cerebro tendrían que trabajar recuperando posibles rutas y seleccionando la que sea óptima. Todo esto entre otras funciones que dejarían y ejecutarse a nivel cognitivo (como funciones ejecutivas, memoria o atención). Javadi et al. (2017) ha afirmado que depender del GPS para navegar u orientarse puede tener un efecto dañino en áreas del cerebro como el hipocampo, que está involucrado en la memoria y la navegación. Así mismo, su estudio examinó la actividad cerebral generada en el hipocampo y la corteza prefrontal de los participantes que circulan en las calles de un barrio de Londres a través de una simulación. Se observó que la actividad cerebral era mayor cuando aumentaba el número de opciones para elegir, pero no se detectó actividad cerebral adicional cuando las personas seguían las instrucciones del GPS. Obviamente, este es un tema emergente en el área, que ofrece un nuevo campo de acción.
Con relación a las estrategias cognitivas, hay dos formas populares principales de navegación humana: estrategias egocéntricas y alocéntricas. La primera utiliza distancias e indicaciones hacia o, desde puntos de referencia individuales con respecto a la posición del cuerpo del sujeto. A su vez, la navegación alocéntrica es una estrategia centrada en el mundo que utiliza información sobre distancias y ángulos entre diferentes ubicaciones en el entorno, independientemente de la posición del sujeto (Boccia, Nemmi, & Guariglia, 2014). Ambas estrategias coexisten: las personas que son buenas para navegar pueden cambiar de un marco de referencia a otro dependiendo del mejor enfoque para la situación dada. Sin embargo, se ha sugerido que el aprendizaje de mapas puede influir en el conocimiento alocéntrico, mientras que el aprendizaje en ruta en el egocéntrico, lo que respalda la idea de que podrían ser procesos parcialmente disociables, incluso si son aprendendidos en paralelo (véase Ekstrom, & Isham, 2017).
Objetivos
El objetivo general de la presente actividad es concienciar a la población universitaria sobre el impacto de los dispositivos digitales en la cognición y fomentar buenas prácticas. Además, de forma específica, esta actividad trata de fomentar la reflexión sobre las propias estrategias cognitivas, a la hora de movernos en el espacio, a través del acercamiento a os últimos estudios en el campo de estudio.
Contenidos
Viernes, 4 de diciembre 2020
- De 15:00 h a 15:30 h: Ponencia sobre los efectos de la digitalización
- De 15:30 h a 18:00 h: Yincana: muévete con la ciencia. Actividad práctica en la que los alumnos realizarán diferentes desplazamientos por el casco histórico de Valencia de forma on-line. La actividad propuesta es una simulación lúdica sobre la búsqueda del santo Cáliz con diferentes pruebas. Los participantes podrán opcionalmente descargarse una app destinada al rastreo y valorar posteriormente su ejecución, según las estrategias cognitivas explicadas en la primera parte (ponencia inicial).
Inscripción