La instalación y uso (fuera del ámbito sanitario) de desfibriladores semiautomáticos externos (en adelante DESA), por primeros intervinientes ajenos a la profesión sanitaria, ante una situación de parada cardiaca, está regulada en la Comunidad Valenciana por el Decreto del Consell 159/2017, de 6 de octubre.
Aunque la UCV no cumple ninguno de los requisitos que hace obligatorio disponer de DESA en sus instalaciones, en 2013 decidió convertir sus sedes en ESPACIOS CARDIOPROTEGIDOS dotándolas del correspondiente equipo desfibrilador.
La colocación de dichos DESA sigue todas las disposiciones reglamentarias de registro en la Conselleria de Sanidad, formación de personal no sanitario capacitado para su uso con su reciclaje bienal correspondiente, revisiones periódicas de sus baterías y electrodos, señalización de su ubicación, etc.
De esta forma se dispone de 19 aparatos DESA fijos, así como 5 aparatos DESA portátiles para actividades formativas fuera de las sedes de la UCV.
La formación del personal no sanitario capacitado para su uso se realiza por docentes acreditados por la Conselleria de Sanidad siguiendo el programa formativo indicado en los artículos 9 al 11 del Decreto 159/2017 mencionado antes.
Si bien su uso no ha sido realmente necesario, al menos en la primera década de su implantación, confiere a los espacios de la UCV una protección cardiológica "preventiva" que puede contribuir a salvar vidas en determinadas situaciones.