El modelo educativo está centrado en el aprendizaje personal y continuo, combinando la diversidad metodológica del aprendizaje cooperativo, del aprendizaje basado en problemas y del estudio de casos y la exposición-lección magistral. Este modelo educativo está centrado en los resultados, expuestos en términos de competencias generales y específicas y considera esencial la participación activa del estudiante en relación con los otros estudiantes y el profesor, quien facilita, guía y motiva al alumno, planificando y diseñando actividades de aprendizaje coherentes con los resultados.
Este modelo es integrador de la visión académica, profesional y vital y, a su vez, constructivo. El modelo como proceso sitúa a la persona en un itinerario en el que sea capaz de aprender permanentemente porque ha adquirido las estructuras mentales necesarias para afrontar nuevos y complejos problemas.
Este modelo educativo favorece el aprendizaje significativo por la comprensión y la investigación. Además, adquieren un relieve específico las TICs y sus posibilidades para desarrollar nuevos modos de aprender.