XI Curso de Comunicación, Seguridad y Defensa
“Si un periodista ruso califica de guerra lo de Ucrania le pueden mandar quince años a Siberia”
viernes, 13 de mayo de 2022
El Instituto de Estudios Estratégicos e Internacionales (IEEI) de la Universidad Católica de Valencia (UCV) ha celebrado la primera jornada de su XI Curso de Comunicación, Seguridad y Defensa, en la que se ha analizado el presente y futuro de la defensa nacional y el papel de OTAN, cuando se cumplen cuarenta años de la incorporación de España a esta alianza internacional.
En la mesa redonda sobre la Guerra de Ucrania que ha centrado la jornada ha participado el periodista Miguel Ángel de la Cruz, especializado en seguridad y defensa nacional, que ha estado con las tropas españolas en todas sus misiones internacionales desde los años noventa como enviado especial de Antena 3. De la Cruz ha subrayado la existencia de una “gran cantidad de propaganda rusa” en el marco de este conflicto.
“Se trata de propaganda que no se cree nadie, a la que se suma una represión total por parte del Kremlin a los periodistas rusos. No podemos olvidar que el pasado 4 de marzo Putin promulgó una ley que permite mandar quince años a Siberia a un periodista solo por mencionar la palabra ‘guerra’ refiriéndose a la invasión de Ucrania”, ha lamentado De la Cruz.
Esta situación antidemocrática ha llevado “al cierre de muchos medios de comunicación en Rusia y ha obligado a que los grandes medios extranjeros se vayan del país, por miedo a que sus periodistas acaben en la cárcel. Lo cierto es que en esta guerra hay muchísima información y se han conformado dos bloques: uno en el que se informa de manera libre, Occidente, y otro en el que informa un aparato represor, Rusia”.
“En los últimos años se ha buscado más el ‘click’ y el ‘like’ que comprobar las informaciones”
Por otro lado, De la Cruz ha asegurado en la UCV que la invasión rusa de Ucrania ha devuelto a su profesión uno de los “pilares fundamentales” del oficio periodístico: “En primer lugar, la observación directa del acontecimiento y, en segundo, la comprobación de las informaciones que nos llegan”.
“Los periodistas existimos para ver lo que sucede, acudir al lugar donde se producen los hechos, hablar con los protagonistas, así como para cumplir normas muy básicas y obvias de la profesión, principalmente contar la verdad y comprobar las fuentes”, ha aseverado.
En ese sentido, De la Cruz ha explicado que en el transcurso de esta guerra “los periodistas han bebido de sus propios medios informativos, de los corresponsales que se han enviado a la zona de guerra, y de las redes sociales”. Sin embargo, a causa de las “inexactitudes” y “bulos” propagados a través de las redes, los medios han activado “de manera muy insistente” los mecanismos de verificación de las informaciones.
Es una lección que los periodistas aprenden “desde el primer día de facultad”, pero “desgraciadamente, en muchas ocasiones, sobre todo en estos últimos años, se ha buscado más el ‘click’ o el ‘like’ y se ha restado importancia a la comprobación de la información que llega a los medios”, ha expuesto De la Cruz.
Pablo Oñate: “En la Guerra de Ucrania, parece que, por primera vez, la UE ha actuado con una sola voz”
Por su parte, el catedrático de Ciencias Políticas y de la Administración Pablo Oñate, de la Universidad de Valencia, ha abordado las posibles consecuencias de la guerra a nivel geoestratégico y político, así como el modo en que este conflicto puede afectar a la concepción global de las relaciones internacionales, desde los puntos de vista euroatlántico y asiático.
“La invasión ha provocado un reforzamiento de la OTAN, principalmente, y de la Unión Europea –como sucedió con la gestión de las vacunas-, pese a que haya países que no secunden con demasiado entusiasmo los postulados de Bruselas respecto a este conflicto. Por primera vez, parece que la UE se ha comportado como un solo actor, ha tenido una sola voz en la esfera internacional. Lo ha hecho con el envío de armas y la acogida a miles de ucranianos refugiados”, ha remarcado.
Dentro de la UE también los miembros han ido a una, según ha explicado Oñate, “comprometiéndose, por ejemplo, con acuerdos para no comprar gas a Rusia. España, de hecho, ha multiplicado por diez las exportaciones de gas para cooperar con los países que se van a ver más afectados por los recortes”.
“Antes de la guerra había ciertos actores internacionales que parecían apagados o con pocas ganas de actuar en el escenario global, como EE. UU. La propia Rusia ha realizado este movimiento con la pretensión de tener un papel relevante en el mundo, pero ha realizado un mal cálculo. No pensaban que la reacción de la sociedad internacional a base de sanciones iba a ser tan contundente”, ha subrayado.
Por su parte, China está en “‘standby’”, en opinón de Oñate, “tratando de aprovechar la situación para defender sus intereses; aunque ahora mismo tienen un problema importante con su política de covid 0, a causa del fracaso de su vacuna”.
Román Ortiz: “Aunque Putin se vaya del Gobierno, hay un consenso de continuar la guerra en la élite gobernante rusa”
También ha intervenido en la mesa redonda el consultor internacional en seguridad Román Ortiz, que ha analizado el escenario de la Guerra de Ucrania y las consecuencias “que promete tener en la seguridad europea y global”. Para Ortiz, la invasión rusa está actuando “como una suerte de acelerador de algunos cambios que ya estaban en marcha a nivel internacional, incrementando su impacto. La posibilidad de que se dé una falta de alimentos y surjan hambrunas está ahí, y parece claro que la transición energética también se va a acelerar”.
“Las perspectivas de evolución del conflicto han cambiado también, después de que Rusia haya modificado sus objetivos de guerra iniciales y ahora esté apostando por otros más limitados. Creo que la guerra se va a alargar y lo cierto es que la ventaja está crecientemente en el lado ucraniano y es posible que recuperen parte del territorio que ha ocupado Rusia”, ha apuntado Ortiz.
Por otro lado, este experto analista ha aseverado que la salida de Putin del Gobierno “no necesariamente va a significar el final del conflicto”, dado que “Rusia tiene fuelle militar para aguantarlo y existe un consenso importante en la élite gobernante de Moscú en que hay un juego de intereses fundamentales para Rusia en Ucrania”.
El encuentro ha finalizado con su segunda jornada, celebrada en la base de la OTAN en Bétera, donde los alumnos del curso han realizado una simulación de un proceso de incorporación a una zona de conflicto. El teniente coronel José María Armenta ha presentado la base a los estudiantes; el comandante Rubén Latorre ha propuesto una serie de actuaciones ficticias; y el comandante Óscar Abid ha presentado el escenario de crisis a analizar.
Posteriormente los alumnos se han dividido en grupos de trabajo por especialidades. Ha puesto el colofón al curso una exposición del Batallón de Policía Militar de la base.